El
pórtico de San
Antonio Abad
Gaudí fue
alumno de los Escolapios de Reus y le bautizaron “Antón”
El convento de San Antón Abad fue creación de una canónica
regular antoniana establecida en 1430 en la actual Ronda de San Pablo
y calle de San Antonio Abad, destinado a hospital de leprosos o Lazareto.
En 1433 se comenzó la iglesia que se terminó en 1458. En
1803 se extinguió la comunidad y los edifcios pasaron a manos de
los padres Escolapios. que los dedicaron a la enseñanza de los
pobres a partir de 1815.
La iglesia, cuyo pórtico
de tres arcos ojivales se abre a la calle de San Antonio y en las enjutas
aparecen esculpidas los escudos reales de Alfonso V el Magnánimo,
rey de Aragón y de Nápoles y de su esposa la reina Maria
de Castilla, además de la TAU de la orden de San Antonio Abad,
dio nombre a la Ronda dedicada al santo, sí como al mercado y la
puerta en la muralla. El convento fue incendiado en la Semana Trágica
de julio de 1909. Aunque la Iglesia conservó su estructura gótica,
perdió el coro y el retablo de Jaime Huguet de 1456.
En julio de 1936 la destrucción
fue más allá, hasta el extremo de proceder a la voladura
de las bóvedas. El pórtico, abierto a la calle de San Antonio.
Consta de un piso superior con tres ventanas ojivales de las cuales una
es auténtica y las otras reproducciones de inicios del siglo XX.
Por haberse tapiado la comunicación
entre el pórtico y la iglesia, dejó de tener una función
religiosa y se convirtió en local comercial dedicado a la colchonería
y pasó luego a la venta de objetos de artesanía. Durante
un tiempo quedó en desuso.
Es una verdadera pena que un elemento arquitectónico de estilo
gótico tardío con tres hermosas bóvedas de crucería
y los escudos reales en la fachada no pueda tener un uso más dig
no. Existen actualmente unas cristaleras que aislan el espacio del pórtico
de la calle y permiten la visión del recinto desde el exterior.
Si se pudieran completar con una reja se podría destinar el recinto
a capilla abierta para recordar el culto a San Antonio Abad. de tanto
arraigo en el barrio y de tanta tradición como es la «Festa
dels Tres Tombs” y la bendición de los animales el día
de San Antonio. Si hay una Ronda, un Mercado, una calle, y hubo una puerta
de la muralla dedicados al santo, sería bueno que una imagen del
sinpático santo acompañada del tradicional cochinillo estuviera
a la vista de los paseantes por el barrio. Además hay que entender
otra cosa, Antonio Gaudí Cornet, fue bautizado el 26 de junio de
1852 en la prioral iglesia de San Pedro de Reus y. según consta
en el Llbro de Bautismos. Se le impusieron los nombres de Antón,
Plácido y Guillermo, en homenaje a su madre Antonia Cornet Bertran,
a su tío y padrino de bautizo, Plácido Gaudí Serra
y al santo del día San Guillermo, abad. Gaudí firmó
indistintamente como Antonio a como Antón, porque se trata de dos
santos diferentes, San Antonio de Padua y San Antonio Abad, pero el nombre
que figura en su partida de bautismo es Antón. Cuando en 1882 los
socios de la “Associació Catalanista d’Excursions Científicas”,
y la “Associació d'Excursions Catalana” firmaron el
documento que propugnaba la unión, se puede ver la firma de Antón
Gaudí.
San Antonio y Gaudí
Gaudí fue alumno del os Escolapios de Reus, establecidos en el
antiguo convento de San Frsncisc, y allí cursó por entero
el Bachillerato. Ahora está en marcha el proceso de beatificación
de Antonio Gaudí en reconocimiento a su ejemplar vida cristiana
y es de esperar que, a pesar de los despropósitos de algunos que
se oponen a ello “in odium fidei”, es muy posible que algún
día sea Gaudí el primer arquitecto en toda la historia que
reciba veneración como beato proclamado por la Iglesia. En este
caso seria muy bueno que su imagen pudiera figurar junto a la de su santo
patrón en el pórtico de una iglesia que fue y es sede de
un colegio de las Escuelas Pías, paralelo al de Reus donde Gaudi
recibió una educación que tan excelentes resultados dio
tanto desde el punto de vista cultural como religioso. El pórtico
de lo que fuera esta desaparecida iglesia debe dar testimonio de la vida
del santo penitente, patrón de las animales, que las estampas antiguas
representan encima de un globo rodeado de llamas, el fuego de san Antonio
Abad, con una cruz potenzada con campanillas y de varios cerdos, la bestia
inmunda, símbolo del pecado, que el santo supo vencer a pesar de
la fuertes tentaciones sufridas en el desierto.Por desgracia en 2003 los
padres escolapios han alquilado el pórtico y ahora alberga un bar,
destino claramente inadecuado para un espacio histórico-artístico
catalogado.
Juan Bassegoda
i Nonell, Conservador de la Real Cátedra Gaudí
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