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Farolas para el
Ayuntamiento de Barcelona (1878) "Adoptada está solución en las farolas que proyectamos lo hacemos en forma esférica que va apoyada por un aro que intercepta tres montantes de bronce que constituyen el armazón del farol elevándose lo conveniente para proteger de cualquier choque accidental el cupulino de ópalo y estando dispuestos en el sentido de la mayor dimensión horizontal propia de los rayos luminosos. (...) "El escudo de la ciudad ocupará el campo de la columna con la policromía heráldica conveniente. La parte superior de los brazos, y para evitar los intensos reflejos que produciría el metal a los rayos del sol será rojo con estrías doradas y por fin la grande base de la columna sobre una pieza que encajando con la parte superior del zócalo de mármol tiene en tres caras unes vástagos que perpendicularmente se atornilla una espiga que se introduce en unos agujeros hechos convenientemente que siendo tres, atan perfectamente la columna al pedestal. El hierro limpio y pulimentado en las partes más convenientes a la ejecución y buen efecto, se recubrirá con un barniz antihigrométrico de buena duración que preservará de los efectos de la humedad." Además, Gaudí propone un sistema de pago de la obra no a precio alzado sino al precio que saliera después de su correcta ejecución con el convencimiento que se gastaría menos de lo presupuestado: "Fijado el presupuesto para la realización, se encarga ésta, no por una cantidad fija, llamada comúnmente alzada, sino por la que resulte después de la ejecución, es decir, que siendo el presupuesto del candelabro (...) tres mil quinientas, y teniendo en cuenta los imprevistos que se cuentan en un tres por ciento, da un total de: tres mil seiscientas cinco pesetas; estando completamente seguros que su coste no excederá de la citada cantidad, siendo de esperar que todavía resulte un sobrante a favor del Municipio."
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