La Pedrera acoge un congreso de turismo cultural
Hoy en día, el turismo es la primera industria del mundo .
El derecho al turismo se ha convertido implícitamente en uno de los derechos humanos, al menos bajo la forma del derecho
a desplazarse libremente. Tanto si es popular como de élite, de evasión o formativo, en
este mundo de tránsitos el turismo nos concierne a todos. Todos somos, en un momento u otro del
año, de una manera u otra, turistas.
En la tradición europea, la cultura ha formado parte desde el comienzo de la esencia del turismo.
Sin embargo, en la mayoría de los casos no es el objetivo explícito, sino el pretexto legitimador
de una experiencia recreativa. El turismo es una oportunidad para la cultura, pero a la vez la
consume, la contamina y, al final, la puede destuir . Frente a este fenómeno, las políticas
públicas de acogida han tardado mucho en definirse, y a menudo chocan con las necesidades de la
agenda local e incluso con la orientación de las instituciones culturales, que no se han concebido
de entrada desde la perspectiva del desarrollo turístico. Además, la saturación
turística, su presencia constante en el espacio público y en la vida cotidiana, y las tensiones
derivadas de la apropiación comercial de la identidad colectiva, han venido suscitando últimamente
un creciente malestar cívico —malestar muy evidente, por ejemplo, en Barcelona.
El encuentro Nuevas políticas para el turismo cultural. Desafíos, rupturas, respuestas
, dirigido exclusivamente a profesionales y teóricos de este ámbito, pretende abordar
el conflicto entre un turismo cultural heterogéneo y masificado y una política sostenible
de conservación del patrimonio . El edificio de La Pedrera, declarado Patrimonio de la
Humanidad, acogerá la conferencia y ofrecerá también un buen ejemplo de la problemática
tratada.
Viernes 27 Mayo 2005
Fundació Caixa Catalunya |